Despertó

Despertó, aún era media noche, el silencio cubría la estancia, como una manta ligera, mi cuerpo, desnudo posaba sobre la cama, ocupando en zig zag un espacio milimetrado para dos, pero espaciosamente amplio para uno. Abrí los ojos, dos cuerpos permanecían inmóviles, tan juntos y ninguna parte de su cuerpo se rozaba. Me quede quieta observando las posiciones de dos cuerpos soñando con lugares diferentes a éste, al ahora. Me sobrevino una fuerza, alargue mi mano, lentamente, rozando la sábana, y lo toqué, pareció no darse cuenta, pero eso duro menos que lo que dura un pestañeo, entonces, respiró profundo y dio media vuelta, quedando la mano sola, caída sobre la nada, sobre ese espacio zigzagueante que quedaba a la distancia exacta entre él y yo. Sara y.

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