Amanece

Amanece y el techo se me cae, todo se derrumba, no puedo respirar, los auto reproches invaden mi silencio, rompen mi sueño, acepto que me ganó el miedo a perderte, a tu puede que infinito silencio, y mientras, yo sigo echándote de menos, sujetando mi necesidad de estar ahí, preguntándome una y otra vez, cómo se deja de querer lo que sin querer quieres. Sara y.

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